Estados Unidos reafirma que la frontera no está abierta a la migración irregular y solicita que no se preste atención a los rumores. La Patrulla Fronteriza insiste en que la frontera no está abierta a la migración irregular después de que alrededor de mil migrantes se congregaran a lo largo de la línea fronteriza entre México y Estados Unidos, en Ciudad Juárez, justo enfrente de la ciudad de El Paso, en Texas.
Esta situación se produjo debido a la difusión de rumores falsos a través de las redes sociales y entre los propios migrantes, quienes creían que Estados Unidos les permitiría ingresar.
"La frontera de Estados Unidos no está abierta a la migración irregular. No escuchen las mentiras de los contrabandistas. Las políticas de inmigración de Estados Unidos no han cambiado", declaró Sean Coffey, agente de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas.
El agente recordó que, según el Título 8, "las personas y familias que lleguen sin autorización estarán sujetas a expulsión y podrán ser devueltos a su país de origen, y que a las personas que son expulsadas se les puede prohibir el reingreso durante cinco años".
El agente hizo un llamado a los migrantes para que "confíen únicamente en la información oficial del gobierno de Estados Unidos, y no en los rumores de las redes sociales u otras fuentes no oficiales".
Algunos de los migrantes en la frontera informaron a la agencia de noticias Reuters que habían estado esperando durante semanas para asegurar citas y solicitar asilo a través de una aplicación móvil llamada CBP One, y estaban ansiosos por intentarlo en la frontera.
La semana pasada, en una conferencia de prensa, el Subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional, Blas Nuñez-Neto, reiteró que los migrantes deben utilizar los medios legales y seguros disponibles
Como la aplicación móvil CBP One, que permite el cruce de más de 1.450 migrantes diariamente en los puntos de entrada, así como el programa de parole humanitario basado en patrocinadores para cubanos, venezolanos, haitianos y nicaragüenses.
El hecho de que la mayoría de personas sorprendidas cruzando la frontera no tengan derecho a asilo y sean retornadas es una realidad que debe ser tomada en cuenta.
Esto nos indica que aquellos individuos que intenten ingresar a un país sin cumplir con los requisitos legales correspondientes no podrán acceder a la protección que brinda el asilo. Esta medida busca regular y controlar el flujo migratorio en las fronteras, evitando así posibles situaciones de ilegalidad y protegiendo los derechos de los ciudadanos.
También ha dejado claro que las sanciones para la mayoría de personas que crucen sin autorización son estrictas.
Además de la prohibición de ingreso durante cinco años, estas personas podrían enfrentar sanciones penales. Estas medidas buscan generar un mayor control y evitar la entrada irregular de personas al país, promoviendo así el respeto a las leyes migratorias y fortaleciendo la seguridad nacional.
Comments