Las autoridades de Estados Unidos han implementado la medida conocida como Gestión de Deportación Familiar Acelerada (FERM) con el objetivo de determinar de manera efectiva qué familias cumplen con los requisitos para solicitar asilo y cuáles no.
Sin embargo, defensores de los derechos de los migrantes han expresado fuertes críticas hacia esta acción, ya que consideran que dificulta aún más la obtención de asilo en Estados Unidos.
Hasta el momento, aproximadamente 62 mil personas se encuentran incluidas en el programa FERM, según informó el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
¿Cómo funciona esta medida, especialmente dirigida a los migrantes que son padres de familia?
Cuando los migrantes padres de familia son liberados en la frontera, se les permite viajar dentro de Estados Unidos con un monitor que llevan en su tobillo y que contiene un sistema de geolocalización (GPS).
Además, se les exige estar en sus hogares desde las 11 de la noche hasta las 5 de la mañana. Adicionalmente, un agente del ICE los supervisa de manera frecuente.
Semanas después de su llegada a suelo estadounidense, los jefes de familia incluidos en el programa FERM tienen una entrevista inicial con un oficial de migración.
Aquellos que no cumplen con los requisitos establecidos ven acelerado su proceso de deportación, a menos que apelen su caso ante un juez en una audiencia que generalmente tiene lugar días o semanas después de la decisión inicial.
Cabe destacar que el programa FERM se ampliará próximamente. A principios de mes, el gobierno liderado por Joe Biden anunció que se implementará en más ciudades de Estados Unidos.
Durante el mes de julio, los arrestos de familias en la frontera sur aumentaron un 34%, alcanzando las 60 mil detenciones. En contraste, las detenciones de adultos solteros disminuyeron casi a la mitad, llegando a 62 mil.
Aunque estar en el programa FERM implica no estar bajo custodia del ICE, el constante monitoreo da la impresión de estar bajo arresto domiciliario.
En los últimos meses, menos del 2% de las familias detenidas en la frontera han sido incluidas en este programa. No obstante, los funcionarios argumentan que el programa se está expandiendo rápidamente.
La idea es integrar a la mayoría de las familias que cruzan la frontera ilegalmente a este programa.
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