En medio de la tensión entre Estados Unidos y México por la instalación de boyas flotantes y alambre de púas en la frontera, los migrantes continúan desafiando las barreras físicas para seguir su camino hacia el norte. En videos recientes se pueden observar a familias, incluso con niños pequeños, sorteando obstáculos en la orilla.
Durante más de dos años, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, ha implementado medidas para evitar el ingreso de migrantes a Estados Unidos. A principios de julio, un informe de un funcionario estatal sobre las lesiones causadas por el alambre de púas y la supuesta orden de negarles agua generaron controversia, aunque el gobierno texano ha negado estas acusaciones.
El gobierno de Joe Biden ha presentado una demanda contra el Estado de Texas por la colocación de una barrera de boyas sin autorización federal.
Además, en julio, México envió una nota diplomática expresando su preocupación por el muro flotante.
Este conflicto en la frontera entre Estados Unidos y México continúa sin resolverse, mientras los migrantes persisten en su intento de cruzar a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades.
Desesperados por llegar a Estados Unidos, un grupo considerable de migrantes ha optado por atravesar la barrera de alambre de púas instalada por las autoridades de Texas en el río Bravo.
La desesperación por cruzar la frontera desde Ciudad Juárez a El Paso, Texas, ha llevado a los migrantes a arriesgarse y desafiar el duro obstáculo que representa la alambrada de filosas cuchillas, instalada antes del muro, con el propósito de entregarse a las autoridades migratorias de aquel país y solicitar asilo.
Este martes, tres mujeres y tres hombres acompañados de dos niños, uno de ellos en brazos, fueron los primeros en cruzar el corto afluente del río Bravo, ubicado a unos 500 metros del puente internacional Santa Fe.
Utilizando solo sus manos, abrieron un espacio en la primera barricada de alambres de navajas y cruzaron uno a uno. Uno de los niños pasó sobre los hombros de uno de los adultos, mientras que el otro fue llevado en brazos.
Posteriormente, lograron escalar la pared diagonal que recubre el río en el lado estadounidense y se encontraron con la segunda barricada, donde hicieron un hueco intentando evitar la peligrosa alambrada de cuchillas.
Una vez que cruzaron, fueron detenidos por la Guardia Nacional y más tarde llegó la Patrulla Fronteriza para iniciar su proceso de detención en Texas.
James Young, jefe de la oficina de la ACNUR en Ciudad Juárez, ha señalado que estas escenas de desafío al peligro de la alambrada de cuchillas demuestran la desesperación de los extranjeros, ya que muchos migrantes están huyendo de la violencia tanto en sus países de origen como durante su recorrido por México.
"Existen personas que huyen por sus vidas y necesitan un lugar donde puedan quedarse y establecerse", explica Young. "Vienen en situaciones de amenazas por parte de pandillas, reclutamiento forzado y persecución.
En estas situaciones, las personas no tienen opción, están amenazadas y tienen que huir. Esto se combina con la extrema pobreza, ya que hay personas que buscan un lugar donde vivir con sus familias y otros que están en busca de una nueva oportunidad", añade.
Comments