Los legisladores republicanos han dado inicio a una audiencia de investigación hacia un posible juicio político contra el presidente Joe Biden. Su intención es proporcionar responsabilidad al presentar sus argumentos al público, a sus colegas y a los escépticos en el Senado.
Los presidentes de las comisiones de Supervisión, Judicial y de Medios y Arbitrios están utilizando esta primera audiencia para revisar los aspectos constitucionales y legales del asunto. Su objetivo es mostrar lo que consideran vínculos entre Joe Biden y los negocios en el extranjero de su hijo Hunter. Sin embargo, testigos clave han declarado que no han visto pruebas contundentes de delitos que merezcan un juicio político.
El presidente de la Comisión de Supervisión, el republicano James Comer, afirmó que los legisladores cuentan con "una montaña de pruebas" de que el padre de Biden "abusó de su función pública en beneficio financiero de su familia".
Comer aseguró que el panel seguirá "rastreando el dinero y las pruebas para proporcionar responsabilidad" al pueblo estadounidense.
Esta es una apuesta arriesgada para los republicanos, especialmente en medio de la posibilidad de un cierre del gobierno federal.
Iniciar un proceso que podría culminar en la destitución del presidente es un asunto de alto riesgo. Además, los legisladores republicanos de la Cámara Baja enfrentan resistencia tanto dentro de sus propias filas como entre sus correligionarios en el Senado.
Estos últimos temen las repercusiones políticas del proceso y afirman que la condena y destitución de Biden es prácticamente imposible.
Al comenzar la audiencia, los demócratas desplegaron una pantalla que muestra una cuenta regresiva de los días, horas y minutos que faltan para el cierre del gobierno.
Esto mientras el Congreso busca con dificultad financiar al gobierno antes del plazo del sábado.
El representante Jamie Raskin, el demócrata de mayor jerarquía en la Comisión de Supervisión, cuestionó la legitimidad de la audiencia, ya que la cámara no ha votado formalmente sobre si se debe iniciar el proceso.
Raskin afirmó que los republicanos están reviviendo denuncias de hace cinco años de Donald Trump, el principal rival de Biden en las elecciones de 2024. Estas denuncias ya fueron desacreditadas durante el primer juicio político contra Trump en 2019.
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