Los cubanos residentes en Estados Unidos están exigiendo una solución urgente a las demoras en la aprobación de los casos de sus seres queridos en el programa de parole humanitario.
Su clamor no es solo una demanda legal, sino también un grito de desesperación por sus familias que están atrapadas en una Cuba que drena sus recursos y esperanza, la larga espera ha agravado la tensión y angustia que sienten, temiendo que sus seres queridos se conviertan en una carga pública y luchando por un futuro mejor para ellos.
Están pidiendo que se dé prioridad a los programas de reunificación familiar y parole, y que se aumenten las aprobaciones para los cubanos, ya que consideran que Cuba es el país menos beneficiado en términos de porcentaje de aprobaciones.
Además, los cubanos expresan su desánimo y tristeza por la falta de avance en la aprobación de sus solicitudes, y recuerdan la dura realidad de represión, falta de libertades y necesidades del pueblo cubano.
En este sentido, destacan la importancia de ayudar a sus seres queridos a salir de una situación económica y social difícil en su país natal.
Es necesario que se escuche la voz de los cubanos y se tomen medidas para acelerar el proceso de aprobación de los casos de parole humanitario.
La espera prolongada solo aumenta el sufrimiento de las familias y la incertidumbre sobre su futuro.
Es hora de actuar y brindar una solución justa para estos cubanos que anhelan vivir en la tierra de oportunidades.
Los cubanos han expresado su descontento no solo por su situación en general, sino también por la gestión del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), acusando a la entidad de manejar la situación de manera arbitraria y caótica.
En Miami, las calles se han convertido en el escenario de su lucha por una gestión transparente y eficiente de las solicitudes de parole, exigiendo que se respete el orden cronológico de las mismas.
Sin embargo, hay casos pendientes desde enero que aún no han sido resueltos, mientras que otros más recientes ya han sido aprobados, lo que aumenta la incertidumbre y la ansiedad en la comunidad cubana.
Ante el creciente clamor, USCIS se ha comprometido a procesar cerca de 1000 formularios al día, a partir del 17 de mayo, pero una demanda presentada busca llevar el programa a juicio.
A pesar de las dificultades, la comunidad cubana en EE. UU. no se rinde y sigue luchando por un futuro mejor para sus seres queridos.
Su voz seguirá resonando en las calles de Miami, demandando justicia y un proceso justo y transparente. Aunque el camino sea difícil, su lucha continuará.
Lainez Rodríguez, una de las patrocinadoras que han solicitado el "parole humanitario", ha expresado su frustración ante la prensa local debido a la larga espera que han tenido que enfrentar más de 400 mil familias.
Según ella, siempre reciben la misma respuesta: que las solicitudes se están procesando en orden cronológico y aleatorio, pero en el caso de Cuba, esto no se está cumpliendo.
Por otro lado, Raúl Cabrera, quien ha solicitado el "parole humanitario" para su hijo, ha manifestado que su hijo está desesperado por salir de la pobreza y la miseria en Cuba: "aquello es un desastre".
El abogado especialista en temas de inmigración, Antonio Ramos, ha explicado que las solicitudes se procesan en dos grupos: 500 por orden de llegada y 500 por sorteo diario.
A pesar de esto, la cola de solicitantes sigue avanzando a un ritmo constante de 500 al día.
Es evidente que la situación de Cuba es crítica y que muchas personas están buscando una salida a la crisis.
Es necesario que las autoridades encargadas de procesar las solicitudes de "parole humanitario" sean eficientes y justas en su labor para poder brindar una oportunidad a aquellos que más lo necesitan.
Comentarios