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Foto del escritorYasel Lopez

Texas y la barrera de boyas colocadas sobre el río Bravo

El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha notificado a Texas que la barrera flotante de boyas que el estado ha colocado sobre el río Bravo (o Grande) viola la ley federal y plantea problemas humanitarios para los migrantes que cruzan hacia el territorio estadounidense desde México.

El gobierno del presidente Joe Biden ha informado al gobernador republicano Gregg Abbott que la barrera colocada este mes cerca de la localidad fronteriza de Eagle Pass, Texas, es "ilegal".

Según Stephen Mumme, politólogo de la Universidad Estatal de Colorado, el estado de Texas no está autorizado para construir barreras fronterizas, ya que esa es una función de Seguridad Nacional. Además, esta medida podría ser considerada una violación a los tratados entre Estados Unidos y México.
la instalación de estas boyas ha generado protestas por parte de organizaciones defensoras de los migrantes, quienes advierten que podrían causar muertes por ahogamiento.

Estas boyas son la medida más reciente del operativo multimillonario de Abbott para reforzar la frontera de 1.930 kilómetros (1.200 millas) del estado con México.

Otras medidas han incluido la colocación de alambre de púas y el arresto de migrantes bajo cargos de invasión de propiedad privada.

La misión conocida como Operación Estrella Solitaria ha sido objeto de escrutinio después de que un agente policial afirmara que se les negó agua a los migrantes y de que se emitieran órdenes para empujar a los solicitantes de asilo de vuelta al río Bravo.

Actualmente se están utilizando dos retroexcavadoras para mover los anclajes de concreto y reubicar las boyas en el río Bravo.

Se ha registrado actividad en el área donde el Gobierno de Texas ha colocado la barrera de boyas marítimas y, con el uso de dos retroexcavadoras, se están moviendo los bloques de concreto que funcionan como anclaje para posteriormente llevarlas al territorio estadounidense.

Estos trabajos se están llevando a cabo desde el pasado miércoles y se basan en un estudio realizado de manera conjunta por el Comité Internacional de Límites y Aguas (CILA) tanto de México como de Estados Unidos.

Este río cubre aproximadamente la mitad este de los más de 3.000 km de la frontera entre Estados Unidos y México.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció la instalación de esta nueva barrera marina como parte de su operación migratoria "Lone Star", la cual también incluye el traslado masivo de migrantes a ciudades "santuario" en otros estados.

Cabe mencionar que actualmente se pueden observar algunas postas de referencia y ya se han cambiado los anclajes de las mencionadas boyas, lo que indica que solo se modificará la colocación de estas últimas para situarlas en los límites de Estados Unidos.

Todo esto se debe a la confirmación por parte de las autoridades estadounidenses de que la mayor parte de la barrera de boyas se encuentra en territorio mexicano, es decir, del lado de Piedras Negras.

De los 305 metros, solo 63 metros de esta se ubican en el río Bravo del lado de Eagle Pass.

El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha dado a conocer un estudio que forma parte de la demanda presentada contra el Gobierno de Texas por la colocación de estas boyas, las cuales violan tratados internacionales de agua.

Se trata de un "muro flotante" hecho de boyas con púas, que se están instalando en el Río Bravo (conocido como Río Grande en Estados Unidos).
El gobierno de Texas está implementando una nueva medida para evitar el cruce de migrantes indocumentados desde México a Estados Unidos.

Teniendo en cuenta las acciones mencionadas que se están llevando a cabo en el río Bravo para reubicar las boyas en los límites de Estados Unidos, se indica que las autoridades de Texas no las retirarán y que forman parte de la Operación Estrella Solitaria.

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